Nicaragua celebra tradicional fiesta de La Gritería .

Los estelianos se preparan para participar en los festejos del día de la Inmaculada Concepción de María. Todo está preparado para que este siete de diciembre de manera simultánea se celebre a partir de las seis de la tarde con alegría, fervor y mucha alegría la purísima.

Previa a la celebración por primera vez se desarrolló en la ciudad de Estelí la feria de la purísima mediante la cual se ofertaron bananos, ayotes, naranjas, cañas, gofios, huevos chimbos y otras golosinas así como bolsas y utensilios de plástico que tradicional se entregan a los que cantan y alaban a la virgen María.
 
Nicaragua celebra hoy el Día de la Gritería, una tradición de origen religioso enraizada en la cultura popular de nuestro país desde hace más de 270 años y dedicada a la Virgen María, patrona nacional.

Por tal razón el Gobierno sandinista declaró feriados este lunes y martes (Día de la Inmaculada Concepción de María) para todos los trabajadores del sector público, anunció la semana anterior la coordinadora del Consejo de Comunicación y Ciudadanía, Rosario Murillo, al leer un comunicado del Ministerio del Trabajo.

Mientras, quienes laboran en el segmento privado de la economía se ajustarán a lo acordado con las respectivas administraciones.

La fiesta religiosa se celebra en todos los pueblos y ciudades del país, pero con especial relevancia en León (segunda urbe más importante), donde tuvo su expresión originaria en el año 1742.

Aunque fue en 1857 cuando, al salir la joven nación nicaragüense de un período de crisis políticas, la celebración adquiere su sello distintivo que llega hasta la actualidad.

Durante la noche de este día los devotos recorren las calles y visitan diferentes altares en honor a la Virgen María, en templos y casas particulares, a la vez que realizan rezos, cánticos y quema de pólvora (cohetes y juegos pirotécnicos) mientras gritan: "¿Quién causa tanta alegría?" y reciben a coro la respuesta: "La Concepción de María"

Una particularidad de la fiesta es la llamada gorra, el brindis que reciben los devotos consistente en dulces típicos preparados para la ocasión, tales como cajetas de coco, de leche, de zapoyol, gofio de pinolillo, leche de burra, huevo chimbo y enchiclado.

También reparten frutas como limones y naranjas dulces, trozos de caña de azúcar; platillos típicos (nacatamal), bebidas del país; chicha de maíz y de cohombro, el compuesto (ponche de frutas con una porción de ron) y postres tradicionales, entre ellos pío quinto, ayote en miel de dulce de caña, atolillo de maíz y arroz con leche.