EE.UU. lanza iniciativa para América Latina que excluye a Nicaragua, Venezuela y Cuba.

Estados Unidos lanza nuevo plan para incentivar el crecimiento económico de 30 países del hemisferio occidental, con excepción de los regímenes de Venezuela, Cuba y Nicaragua, indicó en conferencia de prensa telefónica el Asesor Especial del presidente de EE.UU., Mauricio Claver-Carone, que condicionó la inclusión de Argentina a la actitud que asuma Alberto Fernández frente a las dictaduras del continente.

El plan América Crece, que será presentado con más amplitud el próximo martes 17 de diciembre,y se enfoca en promover inversiones y financiamiento del sector privado, a partir del desarrollo económico que ha experimentado Estados Unidos en los últimos años, y su voluntad de apoyar a otros países en la región, particularmente en materia de energía e infraestructura.

Venezuela, Cuba y Nicaragua están excluidos del plan de la Casa Blanca, porque son dictaduras que están en bancarrota; son un ejemplo del fracaso y, obviamente, el resto de la región no quiere vivir ese modelo de fracaso, quiere seguir el camino de éxito que apoyamos con este programa, aseveró.

Claver-Carone recordó que la intención de EE.UU. es ejercer presión sobre el régimen de Maduro para que este salga del poder por voluntad propia, subrayó.

Washington incrementará las medidas de presión contra el gobierno de Daniel Ortega en Nicaragua, para garantizar un proceso electoral limpio, justo y, obviamente, que terminen las graves violaciones de derechos humanos contra el pueblo nicaragüense.

El funcionario del Departamento de Estado, de origen cubano, afirmó que el crecimiento económico dará estabilidad, democracia y prosperidad a la mayoría de los países de América Latina y el Caribe..

Hasta el momento, existen acuerdos en esa dirección con los gobiernos de Panamá, Chile, Argentina, Jamaica, Colombia; y otros pactos ya están en marcha con Perú, Brasil y El Salvador. Otro proyecto subregional involucra a Honduras, Guatemala y El Salvador.

La Casa Blanca prevé que los financiamientos tengan un impacto inmediato, gracias a un superávit en la producción de gas natural, que ha convertido a Estados Unidos en un exportador de energía por primera vez en su historia.

El bajo costo del gas natural, garantías de préstamos, asistencia técnica y otras ayudas beneficiarán a los países englobados en la nueva iniciativa norteamericana, precisó Claver-Carone.

La propuesta sería la tercera de Estados Unidos en los últimos 58 años para América Latina, antecedida por la Iniciativa para las Américas (1990, George Bush) y la Alianza para el Progreso (1961-1970, John F. Kennedy).