Iglesia Católica de Nicaragua celebrará semana santa bajo restricciones.

La Conferencia Episcopal de Nicaragua pidió este lunes a los feligreses católicos celebrar la cuaresma y la semana santa desde sus casas, y evitar ir a las playas durante las vacaciones de verano, como medidas preventivas frente a la pandemia del coronavirus COVID-19.

"Recomendamos a los feligreses, principalmente a los más vulnerables que, por precaución de contagio de esta pandemia, decidan no participar físicamente de las celebraciones litúrgicas y actos de piedad durante la cuaresma y la semana santa, (y) lo realicen desde sus casas", abogó el Episcopado nicaragüense en una declaración pública.

Asimismo, los obispos invitaron a los católicos a seguir esas celebraciones a través de los medios de comunicación y redes sociales "con paz y serenidad" y "sin remordimientos de conciencia".

En cambio, agregaron, para aquellos fieles que han determinado su participación directa y físicamente en las celebraciones litúrgicas, "les hacemos un llamado que reciban la hostia en la mano y comulgando frente al ministro.

SISTEMA DE SALUD DE NICARAGUA ES DÉBIL

En el documento, la Conferencia Episcopal expresó su preocupación por la rápida propagación del COVID-19 en todo el mundo y que ningún país, incluido Nicaragua que aún no reporta casos, está exento de adquirir el coronavirus.

"Hasta la fecha se encuentra presente en algunos países de la región centroamericana, lo que supone un grave riesgo para nuestro país que cuenta con un débil sistema de salud", advirtieron.

En ese sentido, los obispos recomendaron mantener una distancia de al menos un metro en las liturgias, y al momento de la paz hacerlo sin estrecharse la mano, abrazarse, besarse o cualquier otro contacto físico.

En general, pidieron a los católicos tomar las medidas higiénicas pertinentes como desinfectarse las manos cuando vayan a misa.

NO REALIZAR CONCENTRACIONES MASIVAS

Otra de las recomendaciones de los obispos es que mientras "permanezca la amenaza de la pandemia no se realicen concentraciones masivas o multitudinarias de fieles tanto a nivel nacional como diocesano".

Además, invitaron a todos los nicaragüenses, que desde la razón y la conciencia, aprovechen esa crisis para hacer una autoevaluación de la forma cómo están viviendo.

También que los días de la cuaresma y semana santa no sean utilizados como espacios de recreación en playas y en lugares públicos de aglomeración.

"Se llama a ser responsables con ustedes mismos, sus familias y los demás en el difícil momento que estamos viviendo", apuntaron.

INTENSIFICAR ORACIÓN

Asimismo, hicieron un llamamiento a las autoridades de Salud de Nicaragua y a los medios de comunicación a informar sobre la evolución de la pandemia, a fin de evitar noticias falsas en las redes sociales.

Por otro lado, animaron a intensificar la oración y el rezo del Santo Rosario "poniendo en las manos de Nuestra Señora de Fátima la salud de los enfermos y amenazados por el COVID-19, los agentes sanitarios y los científicos que trabajan en la búsqueda de la cura de este virus".

Las autoridades de Salud de Nicaragua informaron este lunes que no han detectado hasta el momento casos del coronavirus COVID-19.

Nicaragua, a diferencia del resto de países de Centroamérica, no ha decretado ningún tipo de alerta o emergencia por la pandemia, ni ha ordenado la suspensión de las clases.

Tampoco ha restringido la entrada ni movilidad en el territorio a ningún viajero, y ha dicho que no establecerá ningún tipo de cuarentena a los potenciales afectados.

El sábado pasado, el Gobierno de Nicaragua organizó una marcha multitudinaria denominada "Amor en tiempos del COVID-19", en la que miles de simpatizantes sandinistas y trabajadores marcharon por la capital, pero sin la presencia de los convocantes y homenajeados, el presidente Daniel Ortega y su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo.

El Ministerio de Salud, que es el único que tiene las pruebas de laboratorio para confirmar los casos sospechosos de coronavirus, no ha informado cuántas pruebas ha realizado.