El presidente Ortega reaparece en público tras 34 días de ausencia en plena crisis del covid-19

En cadena nacional, el presidente comenzó su intervención enviando su "solidaridad y condolencias a quienes están sufriendo" por la pandemia del covid-19, a la vez que llamó "a la solidaridad y la unidad de los pueblos del mundo".

Ausente de actos en público desde el 12 de marzo, la desaparición pública de Ortega había generado gran incertidumbre y cuestionamientos sobre su paradero e incluso su estado de salud.

Ortega, reapareció esta noche acompañado de la Vicepresidenta y primera dama, Rosario Murillo y parte del círculo sandinista. La aparición se dio tras fuertes críticas sobre la gestión gubernamental frente al Covid-19 que envolvió el “misterio” de su “desaparición”.

“Este virus que se ha multiplicado por el mundo. Hemos estado librando la batalla desde que fue decretada la pandemia. 

“Cuántas pandemias ha vivido la humanidad , cuántos millones de seres humanos han muerto en esas pandemias y epidemias en plena Guerra Mundial, en la Primera Guerra Mundial en la Segunda Guerra Mundial y las epidemias y las pandemias y en medio de las epidemias pandemias, no había alto el fuego, seguían matándose haciéndose la guerra”.

“Está pandemia este virus que se ha multiplicado por todo el planeta ,donde no hay fuerza alguna que pueda bloquearlo, no hay barrera alguna que pueda bloquearlo, no hay muro alguno que pueda bloquearlo, no hay manera”,dijo Ortega.

Desde el 11 de marzo hasta el 15 de abril en Nicaragua tenemos reportados 1.237 personas fallecidas, de ellos solo uno por coronavirus. Los demás por cáncer, diabetes, accidentes de tránsito, suicidios y otros”, señaló esta noche el mandatario, tras asegurar que están trabajando para contener el virus y que han inaugurado varias Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).

Además, Ortega emplazó a que ni Estados Unidos pudo controlar el Covid-19 en las “grandes ciudades”. Señaló que si bien en esas naciones desarrolladas poseen grandes hospitales altamente calificados y con mucha tecnología, con grandes científicos, pero “¿Quién puede ir a pagar el servicio a un hospital privado?”, cuestionó.

A pesar que el país no ha seguido los lineamientos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya que no hay una orden de cuarentena, limitación de movimiento o toque de queda, el jefe de Estado aseguró que están tomando medidas y para esto especialistas están pasando “casa por casa” para enseñar las normas.

“Esto explica por qué la pandemia avanza lentamente en Nicaragua. Todos los casos vienen por contactos de afuera”, dijo Ortega en la transmisión en vivo. Según cifras oficiales, hay nueve enfermos y un fallecido.

Ortega también se defendió de no haber dictado la paralización de las actividades económicas, pese al peligro de contagio.

"No se ha dejado de trabajar porque si aquí se deja de trabajar el pueblo se muere se extingue", manifestó.

"Somos un país con un pueblo trabajador, este es un pueblo que de hambre no se va a morir", enfatizó.

Ortega reveló que un amigo suyo llegó desde Estados Unidos con coronavirus y que finalmente se restableció. Dijo además que el 90% de los hospitales estatales están dotados de todos los recursos básicos para atender el coronavirus y que hay suficientes respiradores y que no ha sido necesario usarlos todos. Dijo que hay médicos capacitados y suficientes reservas de medicamentos. 

"Tenemos las capacidades para atender a la población en tanto el ritmo en que ha venido manifestándose la epidemia ha sido el que nosotros hemos logrado administrar", indicó.

Pese a las expectativas generadas, Ortega no anunció ninguna medida distinta a la estrategia adoptada y en cambio aprovechó para criticar a las grandes potencias y la carrera armamentista que llevan a cabo.

"El mundo ha quedado descarnado con esta pandemia" porque ni las bombas atómicas ni los misiles van a "acabar con el virus", juzgó Ortega. La pandemia del coronavirus ha provocado la muerte de 130.00 personas en el mundo, según la OMS.

"Esta es una señal de dios, que nos está diciendo ustedes van por mal camino gastando miles de millones de dolares en bombas atómicas, en bases y alianzas militares. Esas fuerzas transnacionales que están nada más ambicionando el dominio de todo el planeta, eso es pecado; y el señor nos está mandando esta señal", subrayó.

El pasado 12 de marzo, el mandatario participó en una conferencia virtual con sus homólogos miembros del Sistema de Integración Centroamericana (SICA) sobre el coronavirus donde intervino por “un minuto y quince segundos” para luego “desaparecer”.

Ante el ausentismo presidencial fue Rosario Murillo quien asumió la vocería del Ejecutivo, entregando boletines diarios para informar sobre el avance del virus.

La inasistencia de Ortega a los funerales del diputado sandinista Jacinto Suárez el pasado 2 y 3 de abril reafirmó las dudas sobre su estado de salud. De acuerdo al diario El País, Suárez no era solo un “militante histórico” del sandinismo, sino que fue compañero de celda de Ortega durante la dictadura de Anastasio Somoza y parte del círculo cercano de la familia Ortega-Murillo.

Esta no es la primera vez que Daniel Ortega “desaparece” durante una crisis. En 2017, cuando la tormenta Nate azotó al país al mandatario no se le vio y en 2018 cuando se iniciaron las protestas por un seguro social apareció cuatro días después.