EE.UU. aceptará a 30.000 migrantes al mes de Venezuela, Cuba, Nicaragua y Haití

Estados Unidos anunció este jueves que aceptará a más de 30.000 migrantes al mes de Venezuela, Cuba, Nicaragua y Haití, expandiendo así un programa por el que ya concede actualmente permisos humanitarios a venezolanos.

Estados Unidos expulsará "de inmediato" a México a los migrantes de esos países que intenten cruzar a su territorio de manera irregular.

Con la inclusión de cubanos, haitianos y nicaragüenses, se amplía el programa que EE.UU. lanzó en octubre pasado para entregar 24.000 permisos a migrantes venezolanos y, al mismo tiempo, deportar a México a quienes atravesaran la frontera sin permiso.

La Casa Blanca explica que quienes sean deportados al país vecino del sur por cruzar la frontera de manera irregular no podrán acceder a los permisos humanitarios, ni tampoco podrán solicitarlo aquellos que lleguen "ilegalmente" a Panamá y México.

Asimismo, Estados Unidos quiere triplicar "el reasentamiento de refugiados" procedentes de otras partes del continente en el año fiscal 2023 y acogerá a hasta 20.000 personas provenientes de naciones de Latinoamérica y del Caribe.

Los funcionarios detallaron que la motivación de estas medidas es el "nuevo patrón migratorio" que se está dando en la frontera, ya que "la inestabilidad política, económica y política en todo el mundo está alimentando algunos de los mayores niveles de migración", no vistos desde la Segunda Guerra Mundial.

En este contexto, EE.UU. ha visto en su frontera sur números récord en décadas de migrantes que tratan de cruzar irregularmente, "motivados en su mayor parte por un nuevo éxodo sin precedentes de migrantes de Cuba, Nicaragua y Venezuela", dijo uno de los funcionarios.

Según datos aportados por esas fuentes, en la mayor parte de diciembre las detenciones y expulsiones de migrantes en la frontera sur de EE.UU. fluctuaron entre las 7.000 y las 9.000 diarias, lo que supone una media de 8.000 al día.

"También estamos viendo un aumento de la migración marítima desde Cuba y Haití, que está poniendo a los migrantes en una situación peligrosa", indicaron las fuentes.

Los funcionarios apuntaron que las medidas se aplicarán también a las familias de migrantes y que se van a aplicar en colaboración con México.

"A partir de hoy jueves 5 de enero, si usted está tratando de salir de Cuba, Nicaragua o Haití y va a emprender su viaje a Estados Unidos, no vaya simplemente a presentarse en la frontera, presente una solicitud legal donde usted está, desde hoy si usted no inicia este proceso legal no va a ser elegible para el programa de Libertad bajo palabra, lo reitero necesita primero un patrocinante legal en Estados Unidos y tendrán que pasar por un riguroso control de antecedentes, si su solicitud es aprobada o usted después se presenta en el lugar donde se le diga tendrá acceso, pero si su aplicación es denegada y trata de ingresar ilegalmente a Estados Unidos no se le va a permitir ingresar", anunció el presidente de EE.UU., Joe Biden.

 "Debemos reconocer que mientras Estados Unidos sea la tierra de la libertad, de la oportunidad la gente va a tratar de venir, eso es lo que hicieron nuestros ancestros y no sorprende que esté ocurriendo de nuevo, no podemos impedir que la gente inicie este viaje, pero si podemos pedir que vengan bajo un proceso organizado",dijo Biden.

"Si están solicitando asilo pueden utilizar una aplicación en el teléfono que se llama CBP One para hacer una cita en un puerto de entrada y presentar su solicitud de asilo sin tener que cruzar la frontera ilegalmente y pueden tener una decisión de un funcionario para asilo, si califican los beneficiados por el plan podrían permanecer legalmente en los Estados Unidos por un período de 2 años", explicó Biden.

Biden se trasladará el domingo a El Paso (Texas, EE.UU.) en la frontera con México en la primera visita a la frontera de su Presidencia y al día siguiente visitará la capital mexicana para participar en una cumbre trilateral con su homólogo mexicano, Andrés Manuel López Obrador, y el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau.

En paralelo, EE.UU. anunció este jueves que reforzará la seguridad en su frontera con la contratación y despliegue de más agentes que se unirán a los 23.000 que ya trabajan en la zona.